Como muchas veces pasa, el título de este poemario se origina en el poema “Un cuento para el dragón” que pertenece a un poemario anterior. En dicho poema se narra la historia de un dragón que, aunque felizmente embridado por el amor, “cada día quema algo/para no perder la conciencia de su fuego”.
Está dedicado, como es lógico, a todos los dragones (y también a las “dragonas”), celebrando su fuego.
El prólogo es de Marisol Ramírez y en él hace un análisis que demuestra, con rigor, naturalidad y belleza, que los poemas tienen tantas versiones como lectoras y lectores. Además, la mirada de Marisol sobre esta obra, me devuelve aspectos de mi misma que agradezco profundamente que me hayan sido contados.
La edición original de la Conciencia del Fuego ha sido de 250 ejemplares y actualmente está a la venta. Por ello, cuelgo una pequeña muestra de los poemas que contiene.
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